Como usted recordará, hace un par de semanas la Procuraduría General de la República, que comanda Jesús Murillo Karam, inició una investigación en contra de Banamex, que capitanea Manuel Medina Mora, por haber creado de manera ilegal una empresa de seguridad y el uso indebido de telecomunicaciones.
Bueno, le comentamos que Michael Corbat, el presidente de Citigroup, matriz de Banamex en México, tomó directamente al toro por los cuernos para salir a flote de este problema.
¿Cómo? Resulta que desde Estados Unidos se decidió contratar un despacho especializado en derecho penal para defenderlos, así como para fortalecer los procesos y controles en la división mexicana.
No se lo cuente a nadie, pero nos dicen que el despacho Requena Abogados, que capitanea Carlos Requena, fue el elegido para encabezar a todo el grupo legal que se contrató expresamente no sólo para salir de este lío, sino para reforzar los mecanismos de control en Banamex.
El equipo ha empezado ya a tomar las riendas de este caso que detectó Citigroup en julio mediante una investigación independiente a una empresa propiedad de Banamex que provee servicios de seguridad, la cual fue formada en 1994 para proteger a miembros del consejo de administración y a sus familias.
La investigación incluyó entrevistas a profundidad, una exhaustiva revisión de documentos y archivos físicos y electrónicos, y el análisis pericial de discos duros de computadoras y otros medios electrónicos.
Y como lo leyó en este diario, todo apunta a que las pesquisas de la PGR han hallado que en las tareas que Corbat cuestiona puede estar implicado un ex subprocurador de esa dependencia en los años 90, Federico Ponce Rojas.
Fuente: Periódico Reforma, sección Capitanes.