Ciudad con vocación mundial

Las relaciones internacionales en la actualidad se caracterizan por un dinamismo constante y vertiginoso. Diario surgen temas estratégicos en la agenda mundial provocando el reconocimiento de nuevos actores a escala global.

Entre estos actores -interactuantes en el espacio transfronterizo- destacan los gobiernos locales de las megalópolis, los cuales adquieren un ritmo propio derivado de los procesos de intercambio turístico, comercial, de servicios y migratorio, sorteando diversidad de problemas y desafíos comunes. Sin desplazar a los estados como actores internacionales tradicionales, hoy los gobiernos locales generan intercambios múltiples con corporaciones mundiales, medios de comunicación y organizaciones de la sociedad civil.

Por eso, no debe extrañarnos que el gobierno de la ciudad de México diversifique esfuerzos para consolidar una importante presencia en el ámbito internacional, como resultado de estrategias que van más allá de la firma de protocolos de hermanamiento entre ciudades, pues el fin es abrir nuevas áreas de oportunidad derivadas de los procesos de globalización, congruentes con la realidad mundial.

Estos logros son aprovechar responsablemente el patrimonio histórico, arquitectónico, gastronómico y cultural de la capital del país para atraer turismo extranjero, promover inversiones generadoras de riqueza, incrementar el empleo y diversificar experiencias para solucionar problemas con otras regiones geográficas.

En consecuencia, la agenda internacional de la ciudad de México plantea tres ejes de acción estratégicos: impulso a la presencia internacional de la ciudad, sustentabilidad propia y competitividad ascendente. La coordinación de asuntos internacionales del gobierno de la capital, encabezada por el ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas, tiene el reto de desarrollar estos ejes con profesionalismo para evitar convertirse en un simple espacio de relaciones públicas transfronterizas. Este esfuerzo no significa un desafío a las funciones propias de la Cancillería, sino la valiosa oportunidad de impulsar e incursionar en nuevos ámbitos de acción en la escena mundial desde las entidades. Esta dinámica inevitable está marcada por la globalización, el desarrollo de plataformas de interacción tecnológica, las redes sociales y los retos transfronterizos. Recordemos que en septiembre pasado, Miguel Ángel Mancera, como jefe de gobierno electo, realizó su primera gira de trabajo por Asia, siendo precisamente en China donde conoció programas estratégicos de ciudades como Shanghai. Ahora, la posibilidad de desarrollar proyectos conjuntos con el gigante asiático se vuelve cada vez más viable.

Estrategia de cooperación con China

La ciudad de México tiende a un modelo de Ciudad Digital Inteligente, caracterizada por la digitalización de los servicios para mejorar las condiciones de vida, urbanas y de movilidad.

Si bien a nivel federal la reciente visita del presidente chino, Xi Jinping, relanza la relación diplomática bilateral que vivió momentos de descomposición en el sexenio anterior, la experiencia futura con la ciudad de México será un ejemplo de la dimensión concreta de la cooperación, inversiones e intercambios en áreas específicas como: ciencia y tecnología, tratamiento de aguas, energía, salud, urbanismo e infraestructura, transporte, movilidad y conectividad. El sello y la vocación internacionalista de la ciudad de México están a la vista. Hoy son ejemplo de inclusión e incidencia para fortalecer su capital social con visión de futuro.

Carlos Requena
El economista
https://eleconomista.com.mx/columnas/columna-especial-politica/2013/06/10/ciudad-vocacion-mundial