Mientras la inseguridad sigue imparable en algunas zonas del país, uno de sus principales insumos -la venta, tráfico y fabricación de armas- crece sin control en México y el extranjero, para beneplácito de la delincuencia.
En el ámbito federal, el Programa Nacional para la Prevención Social de la Violencia y la Delincuencia, a cargo de Roberto Campa Cifrián, no ha dado los resultados esperados por la desvinculación y descoordinación entre gobiernos estatales y municipales.
Hace dos años, la oficina estadounidense para el Control de Alcohol, Tabaco y Armas de Fuego (ATF, por su sigla en inglés) promovió la entrada de 2,000 armas a México durante 15 meses, según documentos oficiales publicados en Estados Unidos.
El tristemente famoso operativo “Rápido y furioso” que -adujo EU- buscaba identificar la cadena del contrabando a México, fracasó, porque al ingresar a nuestro territorio se perdió supuestamente la pista de las armas. Y el gobierno mexicano en turno no fue informado.
Hoy, las imágenes de noticieros muestran diariamente miles de armas decomisadas y otras en uso por las llamadas fuerzas de autodefensa, en municipios asediados y dominados por la delincuencia. Son autodefensas civiles, pero no se sabe si están o no vinculadas al crimen organizado.
¿Qué representan las armas en México? Por citar un ejemplo, entre enero y septiembre del 2013, los homicidios cometidos con arma de fuego en Michoacán se incrementaron 44.59% respecto del 2012, según el Sistema Nacional de Seguridad Pública. Esta fuente advierte que los secuestros en esa entidad repuntaron 38.3%, en los primeros nueve meses del presente año, además de la cifra negra por los casos no denunciados.
La industria de las armas crece sin control y, por si no fuera suficiente, un grupo de activistas estadounidenses acaba de anunciar la producción de la primera generación de armas fabricadas con una simple impresora 3D. Estas armas son creadas por máquinas impresoras en plástico -en vez de tinta- y su proceso toma aproximadamente 10 horas.
Lo preocupante en materia de seguridad es que pasan desapercibidas por los detectores de metales y disparan balas letales. Se prevé que estas armas inunden el mercado norteamericano y el mexicano.
Jornada de desarme nacional
En la ciudad de México, programas como: Por Tu Familia Desarme Voluntario, coordinado por la Secretaría de Seguridad Pública del DF, las delegaciones y la Secretaría de la Defensa Nacional, han logrado importantes desarmes por la vía del convencimiento, a cambio de despensas, dinero, computadoras y bicicletas.
Miguel Ángel Mancera advirtió recientemente que la portación de armas es el inicio progresivo para cometer delitos y propuso que se analice elevar a delito grave la mera portación de arma de fuego, como medio eficaz para prevenir y combatir la delincuencia, entre otras acciones.
Revisemos las leyes en esta materia y promovamos también una jornada nacional permanente de desarme, para atajar a la inseguridad que azota al país.
El surgimiento de las peligrosas armas de manufactura casera 3D, ésas que no pueden ser detectadas por los escáneres comunes en aeropuertos u otros lugares públicos, es una realidad.